Es una imagen de madera de cedro policromada para vestir, de 1,80 metros de altura. Fue labrada y regalada a esta Hermandad por Castillo Lastrucci en el año 1924, para que acompañara a la Virgen del Dulce Nombre, en su paso, en Semana Santa.
Ambas imágenes unidas forman la conocida escena iconográfica pasionista y religiosa de la Calle de la Amargura. Tanto la Dolorosa como el Evangelista tienen firmados y fechados en la zona escapular dorsal, el cuando y quien las realizó: “A. Castillo Lastrucci, Sevilla 1924”.
La imagen del San Juan Evangelista fue restaurada en el año 1991 por el Taller Isbilia, que le labró nuevo cuerpo anatomizado, ya que el anterior que poseía era tan solo desbastado. Sus actuales manos las talló Antonio Eslava Rubio en 1956.